Parece que fue ayer cuando celebrábamos un año nuevo y ya hemos consumido casi la mitad del mismo. Seguramente ya has empezado a organizar tus visitas a la playa, piscinas, montaña y ahora es el momento de pensar en proteger mi piel al máximo para poder lucir un bonito bronceado.

Antes debemos saber varios temas a tener en cuenta que muchas personas conocemos y otras no tanto. Según mi piel, edad, tonalidad y teniendo en cuenta si son las primeras veces de la temporada que tomo el sol o ya llevo unas cuantas jornadas haciéndolo. Estas son las preguntas y posibles respuestas para recomendar la mejor opción para ti de una forma sencilla.

1.- ¿Es la primera vez este año que tomas el sol?

- Si la respuesta es sí, lo conveniente es además de utilizar un factor de protección alto (a partir de 30 SPF e incluso mejor el 50 SPF)  si tienes la piel clara y un factor de protección medio (A partir de 20 SPF) si la tienes más oscura.

- Nunca más de 10-15 minutos de exposición plena al sol.

- Si la respuesta es no, y aun estás al inicio, debes reconsiderar que el sol, aunque no notes su actividad en la dermis, ésta se ve afectada por la radiación UVA y UVB, aquellos rayos que no notamos a través del calor pero afectan directamente proporcional al tiempo expuesto y la cantidad de melanina (pigmentos que determinan tu color de piel, de más clara a más oscura).

- Otro factor importante es si es un bebé quien se expone al sol. Aquí recomendamos directamente que la protección sea total, bien sea con ropa, con pantallas protectoras e incluso aplicando el factor total de protección cada 20 minutos.

Dependerá principalmente del tipo de piel, edad y cantidad de melanina que tienes en tu órgano más extenso y el que directamente se ve expuesto.

No debemos nunca, y actualmente está más estudiado por multitud de universidades mundiales, exponernos más de lo necesario pues se asocian diferentes enfermedades en la piel al exceso de radiación sin haberse aplicado la protección suficiente y es por ello que en 5th Avenue te recomendamos su estricta aplicación, con el objetivo de cuidar durante toda la vida, tu imagen para obtener la belleza más soberbia del bronceado con el mayor de los cuidados para ti y los tuyos.  Recuerda que si no lo haces, luego puede ser demasiado tarde.  Cuidando tu piel con protectores solares siempre lucirás la mejor de las imágenes en cualquier época del año.

2.- Cuando ya llevas varias jornadas con el mayor de los cuidados tomando el sol, es el momento en el que puedes permitirte ir alejando los tiempos en los que aplicas bien sea la crema, la leche protectora o el aceite más nutriente. Hay algo bien claro y es que aunque pienses que el sol ya no te va a afectar tanto porque has desarrollado un pigmento más intenso de melanina, debes tener en cuenta, que los rayos UVA y UVB penetran hasta la capa inferior de la superficie, generando las quemaduras que tanto nos han afectado y provocado dolores intensos e incluso la caída de la piel por el exceso de los mismos.

Como ya hemos comentado, cuando tomamos el sol, tenemos varias gamas de productos que según tus gustos pueden protegerte plenamente y ahora llega el momento en el que ya has terminado, te has dado esa ducha tan satisfactoria y llega el momento de hidratar al máximo aplicando un “After Sun” que te aliviará y nutrirá la piel así como protegerá las células para una posterior toma de sol. Es más, tenemos productos cicatrizantes como el Aloe Vera, que en caso de que te hayas quemado un poco disfrutando bajo el sol, el aplicártelo conseguirá acelerar la recuperación de tus células dérmicas como ningún otro producto es capaz de conseguir,

¿Y qué ocurre si no tengo tiempo o no me apetece tomar el sol?

Tenemos también la opción de utilizar autobronceadores e incluso si ya he tomado el sol, prolongador de bronceado para que me dure el efecto mucho más que en condiciones normales.

En 5th Avenue te hemos preparado las mejores soluciones con las mejores marcas, porque aquí sí que no se puede jugar con la calidad y debes utilizar aquella que se merece tu piel. ¡Tenlo muy en cuenta, pues sí hay diferencia!